No hay nada más Peronista que un Peronista acusando a otro Peronista de no ser auténticamente Peronista.
Ni hay nada más Peronista que abrazarte al Peronista al que pronto vas a traicionar.
Nada en este mundo es más peronista que besar apasionadamente a la mujer que pronto vas a abandonar.
Ni hay nada más Peronista que abrazarte al Peronista al que pronto vas a traicionar.
Nada en este mundo es más peronista que besar apasionadamente a la mujer que pronto vas a abandonar.